CHICAGO

Empieza la cuenta atrás para mí aventura particular.

Irónicamente sigo sin encontrar vivienda en Bath, pero aparecerá.

Para muchos estas palabras significarán más bien poco, para alguno casi todo, pero especialmente para un pequeño grupo el comienzo de su año en Chicago.

Maleta, madrugón, taxi, vuelo, L train, por fin el IIT,  bienvenida bajo el edificio de Autocad, que es de Koolhas, ¿pero se pronuncia así?, bueno como sea, la barbacoa, las hamburguesas con forma de flor, el queso, its not for me its for him, la cola para las bebidas, los brownies, si el más grande, la sandia, para sentirnos sanos, la sobremesa en el césped, yo me tomaba una cerveza, los ingleses son mas sosos, mi novio es inglés, aaa vale, nos vamos a la playa, hola soy Valentina y quería ir a la playa con vosotros, encantado, las botellas de un agua gratis, ¿quieres conocer a Jesús?, es que los de las fraternidades son una secta, venga vamos que ya estamos todos, espera que voy a por mí bañador!, línea roja, cargando el billete, el lunes nos dan el U-pass, hasta Fullerton, hamburguesa de queso antes de llegar, el jardín japonés, por fin la playa, cambiándonos tras la toalla, el pareo de Miguel, la socorrista en la barca, la suplente de la socorrista, los buzos escondidos tras los postes, el agua no está salada, vaya vistas, el uruguayo, lo ha hecho muy bien pero venía a lo que venía, ¿a alguna os interesa?, a las 7 en Fullerton con María, el pub, las cervezas draft, cada una diferente, las pizzas a 5 dólares, la salsa buffalo casi no pica, la pita para calmar el picor, sin vueltas, esa es la propina, de copas a la residencia, a por el alcohol, cervezas y ron, ron cola, ron ginger ale, cambia la canción que esta no me gusta, la compañera de Tenessee, cambia esta que tampoco me gusta, Sara y Víctor vuelven del partido, estaba lejos unos 40 dólares, salimos, entramos en este, reparto de DNIs, las locas, la lluvia en la calle, la línea roja a casa, el hostal, otro día y otra vez aquí, menos mal que tenemos guía, la guía pierde a Berbi en la estación, Damen, la tienda de discos, vaya discazos, este tiene una pinta increíble, los clásicos, ¡vámonos ya!, la máquina de fotos, otra atracción más de la tienda, el flash, el otro flash, chupando cámara, ¡salimos por fin!, el reparto de fiambres a los restaurantes chinos, el bar del billar, la negra la última, no la metas, dentro, a por más quarters, las pintadas de la pared, el ambiente de después, el flash burrito que de flash nada, ¡mañana madrugamos!, el Crown Hall y las supermaquetas, la ipod house, vaya currada, yo les voy a sorprender con mi estilo sencillo, claro y les dices lo mítico de ‘no es que esta maqueta es de trabajo’, el ejercicio de las sillas de primero, la sofisticada, la práctica, el buen tiempo, el Milenium Park, las fuentes y los niños, Sandra y su apuesta sin cumplir, Gehry y su fórmula, la judía brillante de Kapoor, el edificio de Piano, la tienda del museo, la guía de arquitectura, Sullivan, planes de conciertos y cine al aire libre, buscando Lake Shore Drive, las fotos en las escaleras, la clara invitación a la terraza privada, los señores con su vino y su queso mirando al mar, la Hancock Tower, el restaurante de la 96, convenciendo al macedonio, el increíble atardecer, las arañas de altura, las dos mesas para evitar la propina, los helicópteros, el mar infinito de casas, al final noche de tíos, las luces en la oscuridad, la no Cheesecake Factory, encuentro fortuito en el vagón, la despedida, la noche en la 4S, espaguetis con aceite,  Sam y el nigeriano, su sistema de home cinema, la recopilación de música, el arte de secarse sin toalla, la tienda de libros, gracias por todo, el tour en barco, y otra vez la vuelta pero a la inversa, L train, vuelo, taxi, madrugón, deshacer maleta, adiós a Chicago, ‘the windy city’, ‘the clean New York’.

el Milenium Park, las fuentes y los niños

buscando Lake Shore Drive, las fotos en las escaleras

la judía brillante de Kapoor